La fotógrafa Gloria Oyarzabal expone parte de su trabajo ‘Susana y los viejos’ en dos espacios de Madrid. Por un lado, sólo durante esta semana, la Sala Águila expone sus fotografías dentro de HACER de PHotoEspaña. Por otro, en Matadero podrá verse otra selección de este trabajo dentro de la exposición colectiva ‘Yo compro calidad’.
La fotógrafa Gloria Oyarzabal muestra parte de su proyecto, aún en curso, ‘Susana y los viejos’ que versa sobre la situación de las mujeres en África y lo que significa ser feminista en ese continente.
Oyarzabal viene trabajando formalmente este proyecto en la residencia artística Ranchito Matadero Nigeria y Sudáfrica durante estas últimas seis semanas. Como resultado de esta residencia ha planteado elementos escultóricos, instalación con proyección y punto de lectura e investigación con una veintena de libros sobre el tema.

© Gloria Oyarzabal
‘Susana y los viejos’ es un proyecto en curso, por lo que en otoño Oyarzabal acudirá a Lagos (Nigeria) otras seis semanas invitada por la Art House Foundation para desarrollar el último capítulo de este proyecto en el que se abordan los discursos de las feministas africanas, siendo las escritoras nigerianas reconocidas teóricas y activistas.
Si el feminismo es ya de por si complejo en el mundo occidental, en África hay que añadir el aspecto racial y descolonizador. La relevancia de este proyecto parte de la importancia de la visibilización de una parte positiva, activista e intelectual del continente africano para romper con la imagen desastrosa y patética que seguimos recibiendo a través de medios de comunicación occidentales.
El resultado de esta primera parte de la residencia puede verse en Matadero de Madrid hasta el 2 de julio en ‘Yo compro calidad’ junto a los trabajos de Richard Forbes (Sudáfrica), Mar Guerrero (España), Héctor Hernández (España), Taiye Idahor (Nigeria), Obinna Makata (Nigeria), Christian Newby (EEUU / España) y Sophia van Wyk (Sudáfrica).
Además, Gloria Oyarzabal muestra ‘Elmina strategy’, que forma parte de ‘Susana y los viejos’, desde el pasado lunes hasta el 25 de junio en la Sala Águila como parte de HACER, el ciclo de exposiciones breves de PHE.
‘Susana y los viejos’ parte de el relato del Antiguo Testamendo, que en el libro de Daniel relata que estando en su jardín la bella Susana, esposa del rico judío Joaquín, es vista y deseada por dos ancianos jueces que la presionan e intentan convencer para que se les entregue sexualmente. Susana se enfrenta a ellos negándose rotundamente. Al verse rechazados, los ofendidos ancianos la acusan de adulterio siendo condenada a morir lapidada. El profeta Daniel, por aquel entonces sólo un niño, descubre el falso testimonio y consigue que sean estos los condenados a morir. Desde entonces Susana es símbolo ancestral de integridad sexual de la mujer.
Artemisia Gentileschi pinta en 1610, con tan solo 17 años y un refinado y virtuoso estilo caravaggista, ‘Susana y los viejos’. A los 19 años, siendo el acceso a las academias de Bellas Artes exclusivamente masculino, su padre –pintor también– le da un preceptor privado. Cómo una macabra ironía el cuadro preconiza lo que dos años más tarde sucedería: Artemisia es violada por su maestro. El padre denuncia al violador ante un tribunal papal y ella es sometida a un humillante examen ginecológico y torturada.
En la segunda mitad del siglo XX las actas del proceso influyeron enormemente en una lectura en clave feminista de Artemisia. Las figuras protagonistas femeninas de su pintura tienen una especial actitud de coraje, de fuerza física y moral, de resistencia al control.

© Gloria Oyarzabal
En esos años las costas africanas bullían en su esplendor en el tráfico de esclavos. En Ghana, portugueses y holandeses se repartían un negocio terrorífico que se acabaría llamando la Trata del Atlántico, creando un triángulo de tráfico humano entre África, Europa y América, siendo la base del progreso económico de la mayoría de los países colonizadores. Ahí, en el fuerte de Elmina, el alto mando al cargo hacía salir a las mujeres esclavas al patio, seleccionaba una que, obligada a subir por una trampilla a su despacho, era violada.
Gloria Oyarzabal (Londres, 1971) es licenciada en Bellas Artes, diversifica su actividad profesional entre el cine, la fotografía y la enseñanza. Programadora y cofundadora de la Sala de Cine Independiente La Enana Marrón en Madrid (1999-2009), dedicada a la difusión del cine de autor, experimental y alternativo.
Vive tres años en Mali desarrollando su interés por la construcción del imaginario africano. Trás su paso por el Máster en Blankpaper sus trabajos se ven en Lagos(Nigeria), Tesalónica(Grecia), Lecce(Italia), Braga (Portugal), Madrid (España), Barcelona,…Su anterior proyecto ‘La Picnolepsia de Tshombé’ fue expuesto en EFTI como ganador de la convocatoria Carta Blanca.En este momento a parte de Matadero y PHE ,su trabajo se puede ver en Athens Photofestival.
- ‘Susana y los viejos’ de Gloria Oyarzbal
- Matadero
- Fecha: hasta el 2 de julio.
- Lugar: Paseo de la Chopera, 14,. Madrid.
- Horario : de miércoles a viernes de 16 a 21 h. y sábados y domingos de 11 a 21 h.
- Entrada: gratuita.
- Sala Águila
- Lugar: Calle de Ramírez de Prado, 3 .
- Fecha: hasta el 25 de junio.
- Entrada: gratuita.